Riesgos de llevar un piercing en la lengua. ¡Toma nota!

Llevar un piercing en la lengua conlleva diversos riesgos para la salud bucal, como han demostrado diversos estudios científicos y la experiencia clínica de odontólogos de todo el mundo. Esto es porque los piercings pueden chocar repetidamente con los dientes y las encías, pudiendo causar pequeñas fracturas en los dientes, aumentar la sensibilidad y debilitar la estructura dental.

Por otro lado, el agujero realizado en la lengua y que atraviesa el piercing es una puerta de entrada a bacterias presentes en la boca hacia los tejidos circundantes. En cuanto a las encías, el contacto constante con el material metálico o plástico del piercing puede provocar inflamación y sangrado.

Riesgos de llevar un piercing en la lengua

Como decimos, los piercings en la lengua pueden ser la causa de infecciones dentales o de perforaciones en los dientes. Estos son algunos de los riesgos:

Infecciones bucales

Uno de los riesgos más comunes asociados con los piercings en la lengua es la posibilidad de infecciones. La boca está llena de bacterias, y un piercing puede abrir una puerta de entrada para estos microorganismos. Si no se mantiene una higiene bucal adecuada, las bacterias pueden multiplicarse y causar una infección. Los síntomas incluyen hinchazón, dolor, enrojecimiento y secreción de pus en la zona del piercing.

Pero no solo eso: las heridas causadas por la perforación pueden infectarse o provocar abscesos.

Daños dentales

El contacto constante de un piercing en la lengua con los dientes puede causarles daños, así como los piercings en los labios, mejillas o frenillo.

El movimiento del piercing contra los dientes puede desgastar el esmalte dental, lo que aumenta el riesgo de caries. Además, existe la posibilidad de que el piercing golpee o se enganche en los dientes, lo que puede resultar en fracturas dentales.

Problemas de habla y masticación

Algunas personas experimentan dificultades en el habla y la masticación después de colocarse un piercing en la lengua. El piercing puede interferir con la pronunciación de ciertos sonidos y causar una ligera dificultad al comer alimentos sólidos. Esto puede ser incómodo y requerir de un período de adaptación.

Daño a las encías

Los piercings en la lengua también pueden causar daño a las encías. El roce constante del piercing contra las encías puede provocar retracción gingival, lo que expone las raíces de los dientes y aumenta el riesgo de sensibilidad dental.

Hay que realizarse una limpieza dental más exhaustiva debido a los riesgos que existen de llevar pirecing en la lengua.

Además, puede dificultar la limpieza adecuada de los dientes y las encías, lo que aumenta el riesgo de acumulación de placa bacteriana y enfermedad periodontal.

Alergias y reacciones adversas

Es también muy común que algunas personas experimenten alergias o reacciones adversas a los materiales utilizados en los piercings, que causa hinchazón, enrojecimiento y picazón en la lengua.

Desgarros

Cuando la perforación no se realiza correctamente, si se realiza en mal sitio o si se utilizan piercings no adecuados, existe un riesgo mayor de que estos se enganchen en el cepillo de dientes o en los alimentos, provocando desgarros en la lengua, los tejidos orales circundantes o incluso los labios.

Esto es bastante doloroso y requiere atención médica inmediata para detener el sangrado y reparar la lesión. En función de la gravedad, podría ser necesario suturar la herida.

Por otro lado, aunque de manera menos común, también existe el riesgo de daño nervioso y de asfixia o ahogamiento:

  • Daño nervioso. Ponerse un piercing en la lengua implica riesgos de daño nervioso en el momento de la perforación cuando no se realiza bien.
  • Riesgo de asfixia y ahogamiento. Existe la posibilidad de que el piercing en la lengua pueda soltarse accidentalmente y ser inhalado o tragado, lo que podría provocar asfixia o ahogamiento. Esto es especialmente preocupante en situaciones de sueño o durante la práctica de deportes de contacto.

Consejos para quienes tienen un piercing en la lengua

Si tienes un piercing en la lengua y conoces estos riesgos es importante que dediques más tiempo a tu salud bucal:

  • Mantén una rigurosa higiene bucal: cepilla tus dientes y lengua después de cada comida y usa enjuague bucal antibacteriano para reducir el riesgo de infecciones.
  • Evita jugar con el piercing: resistir la tentación de jugar o mover el piercing en la lengua puede ayudar a prevenir daños a los dientes y las encías.
  • Controla los signos de infección: estate atento a cualquier señal de infección, como hinchazón, dolor o secreción. Si notas alguno de estos síntomas, consulta a un profesional de la salud de inmediato.
  • Programa revisiones dentales regulares: visitar a tu dentista en Valencia de forma regular permitirá una detección temprana de problemas dentales relacionados con el piercing. En consulta te recomendaremos cada cuánto tiempo tienes que acudir.
  • Considera retirar el piercing en situaciones de riesgo: si practicas deportes de contacto o actividades que aumentan el riesgo de lesiones en la boca, considera retirar temporalmente el piercing.

Por último, si tienes cualquier problema relacionado con tu piercing en la lengua, no dudes en buscar el consejo de un dentista o periodoncista en Valencia para un tratamiento adecuado. ¡Consúltanos!